Nos mataron en la última...

Se creía en que hoy cambiaba la historia, y que los triunfos de local volverían, todos hacían alusión a eso, pero hasta el minuto 90’, ya que a los 90+2, vino lo más triste. Ganábamos y terminando empatando por un penal a último minuto.

Pero la historia alguna vez cambiará, nunca se sabe cuando, pero en lo posible, lo más pronto. No por aquella razón de que necesitemos triunfos. No, si no que por la simple razón de que jugamos bien, pero perdemos. Nos falta más finiquito, no sirve jugar espectacular si terminaremos empatando o perdiendo a último minuto.

Hay errores que nos marcan, y claro, esta es la situación, cuando hay veces que los defensas no se la juegan por la escuadra que defienden. Hay muchos errores que marcaron el partido, uno de aquellos que fueron los fatales, el de desperdiciar la inmensa cantidad de goles en el área rival.

Y eso que partimos bien, ya que Ludueña armó una jugada en donde se insertó en el área y terminó con que lo derribaron en el área. Mauricio Aros fue el que desde los 12 pasos puso la apertura del marcador para la algarabía del buen público celeste que asistió al Estadio El Teniente.

Seguíamos atacando, se mostraba buen fútbol, a pesar de las bajas que existían para este partido, como fueron las de Opazo, Vásquez, Gamarra y Elduayen, a éste último sólo resta un partido para poder retomar las opciones de jugar. Se llegaba al área, pero faltaba combinar mejor, sólo era armar bien una jugada, y que terminara en gol.

Pero no todo es fácil, ya que también sufrimos con las llegadas de Cobreloa, que con el ingreso de Galaz le dio algo de potencial a la ofensiva naranja, que llegaba pero igual que el Capo, sin hacer mayor daño.

Más tarde, cuando ya se jugaba el segundo tiempo vino un carrerón de Ojeda que se fue por la banda derecha y apretó “nitro”, combinó con Teuber, que le devolvió una pared perfecta y en el área sacó un centro preciso para Gutiérrez que estaba en el segundo palo para colocar el 2-0 a favor de un O’Higgins que se notaba muy ansioso del triunfo.

Luego se complicó todo, ya que en la mitad de la cancha se convirtió una falta en contra de un jugador naranja y el “Chucky” González lo sirvió al área del “Beto” González. Pero Diego Olate no se atrevió a interceptar el tiro y Lazaga terminó convirtiendo de cabeza.

Pero no todo quedó ahí, ya que en la última del partido, cuando vino un córner, el Mauro Aros sacó el balón de la línea para impedir el gol naranja, pero la sacó con la mano, y no fue casual ya que fue muy notorio. El árbitro cobró el penal y expulsó a Aros. Finalmente, fue González quien desde los 12 pasos dejó el marcador igualado 2-2 y robó un punto para Cobreloa.

Nota: Matías Aravena Cofré

Fotografías: Christopher Bueno

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